sábado, 14 de enero de 2012

Baila al compás de esta pecera.

Y bueno estamos acá siendo doce trece de enero, ya ni me acuerdo. Estoy a mil no se, tengo miedo, tengo pánico, tengo tantas sensaciones juntas y mi reproductor se basa en black bird y pei pa koa sonando una y otra vez una y otra vez, hoy le conté a Mery como estaba mi situación me dice que estoy enamorada y le dije que no, que cuando este enamorada se iba a dar cuenta, que yo solo lo que hacía era prevenir, mejor prevenir que curar, decían. Creo que al tanto prevenir, al tanto preocuparme por “no..” me olvido de disfrutarlo y si esto antes no me pasaba, claramente que no, tampoco sé cómo manejarlo, es todo nuevo, tan nítido se ve, que no entiendo nada.
Hoy le contaba a Mery, entre tantas cosas que era lo que necesitaba, se lo dije asi seco cual artista canta su canción arriba de un escenario que no sabe en qué ciudad se encuentra. Le dije que solo necesitaba verlo porque lo extraño, que no me interesa ni la hora ni el lugar, ni de que vamos a hablar , solo necesitaba verlo, en ese momento ella me hizo acordar a una situación que hubo en una fiesta, el enamorado se comió a una flaca, quiso arreglar el tema, y ella medio alterada, triste, etc, le dijo que se quede con ella que no le hable que solo necesitaba que este con ella y claramente es lo que necesito, solo que este acá, en cuerpo y alma. Tengo miedo, es notable, miedo a que me lastimen, a lastimar, a que me tomen para la chacota, al tener miedo ponemos un freno, pensamos las cosas, pero actuamos como si no las hubiéramos pensado, o por lo menos yo, me impongo algo y depende la situación lo esquivo y hago las cosas como si no hubiera pensado, y después me puteo y digo boluda yo te dije, es como chocarse contra la pared siendo consciente, un acto algo morboso, masoquista.
Les dije que mi cabeza estaba a mil no?  Al tener la necesidad de estar con esa persona al lado, sabiendo que no va a ser posible empiezo a revisar la agenda del celular, y miro y miro y siempre volviendo a lo mismo. O variando, vaya uno a saber “Hola si, Yasi habla como estas? Bueno me alegro escúchame …” Así empieza todo. Pero al no explicar lo que necesito la situación se desvirtúa y conlleva a que la otra persona piensa que solo quiero sexo, y cuando una se encuentra con esta situación tiene dos opciones, o acepta o le dice “No entendiste”.
Básicamente tengo que aclarar mi cabeza, pensar o no pensar, esa es la cuestión saber que cualquiera de las dos puede fallar y al saber que cualquiera puede fallar, alterarme ante el fracaso, a eso le tengo miedo al fracaso, al rechazo, a la X roja y la chicharra. Es algo que me va a seguir toda mi vida, como a todos ustedes hay algo que los atormenta seguramente. 

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